Haz una breve presentación de tu persona
– Soy Alex March Luján, musicoterapeuta de Valencia especialista en el modelo GIM, y presidente de la Asociación Valenciana de Musicoterapia AVMT.
¿Dónde te has formado como musicoterapeuta?
– Obtuve el Master en Musicoterapia en la Universitat de Barcelona-Les Heures, de la promoción 2002-2004.
¿Qué otros estudios complementarios posees?
– Soy profesor superior de música.
¿Te ganas la vida como musicoterapeuta?
– Parcialmente.
¿Cómo es tu situación profesional?
Trabajo como profesor en una universidad privada, y soy profesor en varias formaciones en musicoterapia.
¿Estás especializado en alguna técnica en particular? – Describe que fundamentos tiene la misma.
Estoy formado en dos de los cinco modelos oficiales de Musicoterapia:
- Musicoterapeuta técnico-especialista en el Modelo Benenzon, tras finalizar sus 4 niveles en el centro Benenzon de Madrid. Este modelo pretende crear, mantener o restablecer la comunicación con un paciente o grupo, utilizando para ello elementos intermediarios (voz, cuerpo, instrumentos musicales) en un contexto de improvisación sonoro musical.
- Musicoterapeuta especialista acreditado en el modelo BMGIM por el Atlantis Institute (EEUU) junto con el Instituto Agruparte (Vitoria), realizado con las profesoras Virginia Clarkson y Esperanza Torres. Este modelo utiliza la música grabada para favorecer la exploración del psiquismo del cliente en un estado no ordinario de conciencia, donde la música fomenta la imaginación y actúa como contenedora de la experiencia.
¿Trabajas de forma grupal o individual?
– Trabajo únicamente haciendo musicoterapia GIM, generalmente en formato individual, aunque también realizo puntualmente encuentros grupales para dar a conocer esta manera particular de trabajo.
¿Cómo estructuras una sesión?
– Una sesión individual consta de varias partes:
1ª fase: Pre-sesión o “preludio”. En ella, el terapeuta y el cliente dialogan, para así poder establecer el propósito-tema que se trabajará durante la sesión.
2ª fase: Con el cliente en posición tumbada, el musicoterapeuta hace una inducción verbal que conduce al cliente a la relajación física y a concentración psicológica. Una vez conseguido, el musicoterapeuta se dispone a utilizar uno de los programas de música seleccionados.
3ª fase: Experiencia con música. Mientras ésta suena, el cliente verbaliza lo que acontece durante su experiencia, incitado por las preguntas del guía o musicoterapeuta, que ayudarán a la persona a mantenerse centrada en su interior y a profundizar en la vivencia de la música.
4ª fase: Integración: El cliente regresa a la conciencia ordinaria después de acabar la selección musical. Es el momento de hacer una integración creativa del la experiencia, que se realiza a través del dibujo de un mandala.
5ª fase: final sesión o post-sesión. El cliente-viajero reflexiona sobre reacciones físicas, imágenes, sentimientos y emociones de la experiencia. El guía ayuda al viajero a establecer los nexos entre lo acontecido en la experiencia y su momento actual.
En una sesión grupal, hay diferencias sustanciales.
1ª fase: Pre-sesión o “preludio”. En ella, el terapeuta y el grupo buscan un tema común de trabajo, o bien cada viajero tiene el suyo propio y el musicoterapeuta busca una música que pueda casar bien a todos, o directamente se hace una sesión temáticas (propuesta por el terapeuta o por los miembros del grupo). Con todo ello, se establece el propósito-tema que se trabajará durante la sesión.
2ª fase: Igual que en el formato individual.
3ª fase: Experiencia con música. La selección musical para grupo es más corta que en la versión individual, pues aquí los viajeros están en silencio (no verbalizan).
4ª fase: Igual que en el formato individual.
5ª fase: Igual que en el formato individual, compartiendo sus sensaciones durante el viaje con todo el grupo.
¿Qué formación musical posees?
Profesor superior de música.
¿Con qué instrumentos de música trabajas?
Sólo trabajo con música grabada.
¿Qué tipo de músicas utilizas?
Generalmente, la música que se utiliza en GIM es música clásica grabada, agrupada en programas de trabajo. Hoy en día también se utilizan programas de música “new age”, música oriental, etc Ahora creo que es el momento que todos los profesionales, a través de las asociaciones de musicoterapia, nos unamos y hagamos oír ante la administración, luchando a nivel de cada comunidad autónoma por el reconocimiento del musicoterapeuta como profesional de la salud.
¿Compones tu la música?
No
¿Tienes consulta privada?
Sí. Trabajo como musicoterapeuta BMGIM en una consulta dentro de un gabinete psicoterapéutico en el centro de Valencia.
¿Cómo ves la situación actual de los musicoterapeutas en España?
Creo que estamos en un momento bueno, donde hay mucha gente con buena formación en musicoterapia, trabajando en instituciones de una manera seria (hospitales, centros de educación especial, centros educativos ordinarios), y con todo ello, dando a conocer al mundo circundante nuestra profesión. Ahora creo que es el momento que todos los profesionales, a través de las asociaciones de musicoterapia, nos unamos y hagamos oír ante la administración, luchando a nivel de cada comunidad autónoma por el reconocimiento del musicoterapeuta como profesional de la salud. Cada avance individual puede ser un gran paso para todo el colectivo.
¿Qué formaciones recomendarías a otros musicoterapeutas, para complementar su formación?
-Creo que se hace indispensable, tal como tenemos la oferta formativa en España, que un musicoterapeuta complemente su formación con la realización de seminarios y cursos.
¿Posees métodos de evaluación en tu trabajo?
¿Cuáles? Son formularios de creación propia en los que se evalúa de manera cualitativa la evaluación del cliente.
¿Cuáles son las características personales y profesionales que crees debería tener un musicoterapeuta?
Creo que en la relación de ayuda es necesario que el terapeuta tenga una formación sólida en su disciplina (musicoterapia) y en psicoterapia, profundizando más en aquello que se hace necesario ara el ámbito de trabajo en el que uno se especialice. Veo necesario que todo terapeuta haya pasado por un proceso terapéutico personal para poder conocer mejor sus capacidades y limitaciones. Además, creo que un terapeuta debe tener como características personales la paciencia, confianza en el proceso, seguridad en sí mismo y sentido del humor.
¡Gracias Álex por tu tiempo!